El rozamiento entre dos superficies en contacto ha sido aprovechado por nuestros
antepasados más remotos para hacer fuego frotando maderas. En nuestra época, el
rozamiento tiene una gran importancia económica, se estima que si se le prestase
mayor atención se podría ahorrar muchísima energía y recursos económicos.
Históricamente, el estudio del rozamiento comienza con Leonardo da Vinci que dedujo las leyes que gobiernan el movimiento de un
bloque rectangular que desliza sobre una superficie plana. Sin embargo, este estudio
pasó desapercibido.
En el siglo XVII Guillaume Amontons,
físico francés, redescubrió las leyes del rozamiento estudiando el deslizamiento
seco de dos superficies planas. Las conclusiones de Amontons
son esencialmente las que estudiamos en los libros de Física General:
El científico francés Coulomb añadió una propiedad
más
La mayoría de las superficies, aún las que se consideran pulidas son extremadamente
rugosas a escala microscópica. Los picos de las dos superficies que se ponen en
contacto determinan el área real de contacto que es una pequeña proporción del área
aparente de contacto (el área de la base del bloque). El área real de contacto aumenta
cuando aumenta la presión (la fuerza normal) ya que los picos se deforman.
Los metales tienden a soldarse en frío, debido a las fuerzas de atracción
que ligan a las moléculas de una superficie con las moléculas de la otra. Estas
soldaduras tienen que romperse para que el deslizamiento se presente. Además, existe
siempre la incrustación de los picos con los valles. Este es el origen del rozamiento
estático.
Cuando el bloque desliza sobre el plano, las soldaduras en frío se rompen
y se rehacen constantemente. Pero la cantidad de soldaduras que haya en cualquier
momento se reduce por debajo del valor estático, de modo que el coeficiente de rozamiento
dinámico es menor que el coeficiente de rozamiento estático.
Finalmente, la presencia de aceite o de grasa en las superficies en contacto
evita las soldaduras al revestirlas de un material inerte.
La explicación de que la fuerza de rozamiento es independiente del área de
la superficie aparente de contacto es la siguiente:
En la figura, la superficie más pequeña de un bloque está situada sobre un
plano. En el dibujo situado arriba, vemos un esquema de lo que se vería al microscopio:
grandes deformaciones de los picos de las dos superficies que están en contacto.
Por cada unidad de superficie del bloque, el área de contacto real es relativamente
grande (aunque esta es una pequeña fracción de la superficie aparente de contacto,
es decir, el área de la base del bloque).
En la figura, la superficie más grande del bloque está situada sobre el plano.
El dibujo muestra ahora que las deformaciones de los picos en contacto son ahora
más pequeñas por que la presión es más pequeña. Por tanto, un área relativamente
más pequeña está en contacto real por unidad de superficie del bloque. Como el área
aparente en contacto del bloque es mayor, se deduce que el área real total de contacto
es esencialmente la misma en ambos casos.
Ahora bien, las investigaciones actuales que estudian el rozamiento a escala
atómica demuestran que la explicación dada anteriormente es muy general y que la
naturaleza de la fuerza de rozamiento es muy compleja.
La fuerza normal, reacción del plano o fuerza que ejerce el plano sobre el
bloque depende del peso del bloque, la inclinación del plano y de otras fuerzas
que se ejerzan sobre el bloque.
Supongamos que un bloque de masa m está en reposo sobre una superficie horizontal, las únicas fuerzas que actúan sobre él son el peso mg y la fuerza y la fuerza normal N. De las condiciones de equilibrio se obtiene que la fuerza normal N es igual al peso mg
N=mg
Si ahora, el plano está inclinado un ángulo q , el bloque está en equilibrio
en sentido perpendicular al plano inclinado por lo que la fuerza normal N
es igual a la componente del peso perpendicular al plano, N=mg·cosq
Consideremos de nuevo el bloque sobre la superficie horizontal. Si además
atamos una cuerda al bloque que forme un ángulo q con la horizontal, la fuerza normal deja de ser igual al peso. La condición
de equilibrio en la dirección perpendicular al plano establece N+ F·senq =mg
En la figura, se muestra un bloque arrastrado por una fuerza F horizontal.
Sobre el bloque actúan el peso mg, la fuerza normal
N que es igual al peso, y la fuerza de rozamiento Fk
entre el bloque y el plano sobre el cual desliza. Si el bloque desliza con velocidad
constante la fuerza aplicada F será igual a la fuerza de rozamiento Fk.
Podemos investigar la dependencia de Fk
con la fuerza normal N. Veremos que si duplicamos la masa m del bloque
que desliza colocando encima de éste otro igual, la fuerza normal N se duplica,
la fuerza F con la que tiramos del bloque se duplica y por tanto, Fk se duplica.
La fuerza de rozamiento dinámico Fk
es proporcional a la fuerza normal N.
Fk=mk N
La constante de proporcionalidad mk es un número sin dimensiones que se denomina coeficiente de rozamiento dinámico.
El valor de mk es casi independiente del valor de la velocidad
para velocidades relativas pequeñas entre las superficies, y decrece lentamente
cuando el valor de la velocidad aumenta.
También existe una fuerza de rozamiento entre dos objetos que no están en
movimiento relativo.
Como vemos en la figura la fuerza F aplicada sobre el bloque aumenta
gradualmente, pero el bloque permanece en reposo. Como la aceleración es cero la
fuerza aplicada es igual y opuesta a la fuerza de rozamiento estático Fe.
F=Fe
La máxima fuerza de rozamiento corresponde al instante en el que el bloque
está a punto de deslizar.
Fe máx=meN
La constante de proporcionalidad me se denomina coeficiente de rozamiento estático.
Los coeficientes de rozamiento estático y dinámico dependen de las condiciones
de preparación y de la naturaleza de las dos superficies y son casi independientes
del área de la superficie de contacto.
Dibujemos una gráfica en la que en el eje horizontal representamos la fuerza
F aplicada sobre el bloque y en el eje vertical la fuerza de rozamiento.
F= Fe<meN
En el
punto A, la fuerza de rozamiento Fe alcanza su máximo valor meN
F= Fe máx=meN
Si la
fuerza F no cambia, punto B, y permanece igual a Fe máx el bloque comienza moviéndose con una
aceleración
a=(F-Fk)/m
Si incrementamos
la fuerza F, punto C, la fuerza neta sobre el bloque F-Fk se incrementa y también se incrementa
la aceleración.
En el
punto D, la fuerza F aplicada es igual a Fk
por lo que la fuerza neta sobre el bloque será cero. El bloque se mueve con velocidad
constante.
En el
punto E, se anula la fuerza aplicada F, la fuerza que actúa sobre el bloque
es - Fk, la aceleración es negativa
y la velocidad decrece hasta que el bloque se para.
Superficies en contacto |
Coeficiente dinámico mk |
Acero sobre acero |
0.18 |
Acero sobre hielo (patines) |
0.02-0.03 |
Acero sobre hierro |
0.19 |
Hielo sobre hielo |
0.028 |
Patines de madera sobre hielo y nieve |
0.035 |
Goma (neumático) sobre terreno firme |
0.4-0.6 |
Correa de cuero (seca) sobre metal |
0.56 |
Bronce sobre bronce |
0.2 |
Bronce sobre acero |
0.18 |
Roble sobre roble en la dirección de la fibra |
0.48 |
Fuente: Koshkin, Shirkévich. Manual de
Física Elemental. Editorial Mir 1975.
Superficies en contacto |
Coeficiente estático me |
Coeficiente dinámico mk |
Cobre sobre acero |
0.53 |
0.36 |
Acero sobre acero |
0.74 |
0.57 |
Aluminio sobre acero |
0.61 |
0.47 |
Caucho sobre concreto |
1.0 |
0.8 |
Madera sobre madera |
0.25-0.5 |
0.2 |
Madera encerada sobre nieve húmeda |
0.14 |
0.1 |
Teflón sobre teflón |
0.04 |
0.04 |
Articulaciones sinoviales en humanos |
0.01 |
0.003 |
Fuente: Serway. Física. Editorial McGraw-Hill. (1992)